Esta serie es un desastre comercial que sigue de manera forzada las nuevas corrientes ideológicas solo para atraer atención polÃtica. Mientras que abordar temas como la orientación sexual, el sobrepeso y la diversidad étnica no es un problema en sÃ, esta serie lo hace de manera torpe y superficial, a diferencia de obras maestras como "Call Me By Your Name", "The Whale" o personajes bien desarrollados como Samwell Tarly y Ellen Ripley.
Resulta inexplicable que series lideradas por Filoni y Favreau sean tan aclamadas, mientras que se sigue apostando por directores como Leslye Headland, que se escudan en el machismo y el patriarcado en lugar de inspirarse en obras pasadas y contar con guionistas que entiendan "Star Wars". El resultado es una serie sin alma ni propósito, más allá de captar la atención mediática por unas semanas. No tengo muchas esperanzas en su futuro.