La sencillez de la narrativa, la forma de edición que te permite sentir y no pensar, solo sentir y vivir con Augusto y Paulina esa última parte de su vida juntos.
Ese dolor reticente a explotar y que te genera ver a Augusto deteriorarse y la rabia que te hace sentir con la vida y la enfermedad, al ir obligando a qué sus últimos momentos sean muy pronto, es simplemente magnÃfico, una obra de arte y una historia real que las personas que viven como cuidadores callan a diario, parejas, padres e hijos....