CRISTINA ROS RODRIGUEZ

Una película dura pero que gracias a la ternura del protagonista te hace sentir la fuerza que reside en nuestro interior y que casi siempre no sabemos que tenemos, esta vez retratada desde la ingenuidad y el amor que siente el protagonista hacia su primo. Muy humana, una aventura muy real.

Entretenida e inesperada, pues el verano siempre nos sorprende con películas demasiado esperadas, me estoy acordando la última de Indiana Jones, soporífera e insoportable, al menos “La trampa”, te mantiene en estado de tensión y tiene un argumento que, aunque no se sostiene demasiado, te mantiene la atención hasta el final…