Un tema bastante pesado y difÃcil de digerir, pero nada que no sepamos, incluso, a pesar de tratar este tema, está bastante ligera a lo que es la realidad. Un crimen que toda la vida ha existido, pero al que los gobiernos de Latinoamérica no guÃan sus recursos. La pelÃcula no es buena, pero igual te deja reflexionando. Lejos de si es o no simple mercadotecnia, el mensaje es bastante claro: el mundo está podrido, cuiden a sus hijxs.