Carlos Rodríguez Arias

Aburrida, lenta, las buenas actuaciones no son suficientes para una historia que se podría haber resuelto en dos capítulos. Deja la sensación de haber perdido el tiempo y de la promesa de una buena miniserie que nunca se cumple. A veces, con la fe no alcanza. Pésima...

Una película que emociona, que nos hace pensar en nuestra salud mental, en nuestros amores difíciles. Nos interpela, nos hace reír, nos hace ver nuestras debilidades. ¿Luchamos por el amor? O escapamos como cobardes ante el primer obstáculo. A pesar de escenas que caen en lugares comunes el guión se sostiene y tiene ritmo. Buenas actuaciones, excelente música. Entretiene, risas, lágrimas... Recordar a la persona que amamos y ya no está...

Leo las críticas y no sé si estamos hablando de la misma película. ¿Malcolm & Marie"? Dos horas en la que los personajes hablan de por qué no le dedicó la película, histerias, charlas filosóficas, melodías que parecían publicidades dentro del filme, un collage disruptivo. No alcanza con el blanco y negro, con no querer filmar una película de "amor". Nunca pensé que podrían existir dos personas más densas que yo. Esto me da esperanza, aunque no tenga suerte en el amor. El cine tan dialogado se transforma en una lectura, pierde la magia de la imagen en acción. Egos vacíos. Y un cine casi de Cine Club fantasma donde quizás se destaca y se halaga lo que no se entiende. O peor aún, lo que aburre. Prefiero la honestidad de Andy Warhol de dejar por horas la cámara filmando o el disfrute de ayer viendo "Descuida, yo te cuido ". Una pareja como Malcom y Marie son de Ciencia ficción. Más en estos tiempos posmodernos y de pandemia. Nunca les creí las actuaciones. Lo mejor: el estilo arquitectónico de la casa...