Hermosa serie, emotiva y eso que entre los personajes no hubo ni un beso. También es divertida. Los protagonistas parecen muy amigos, pero no pareja y ella se ve de más que 37 años. La yo del pasado que aparentemente tiene buen corazón e intensiones, es una arrogante, mal educada, egoÃsta y manipuladora que por su comportamiento recibe una buena paliza de la vida. También muestran cómo los padres y abuelos hacen diferencias con sus hijos, pero sin moraleja sobre ese tema. Fuera de esos detalles, deja un buen mensaje y anima a seguir adelante, afrontar las dificultades y adoptar una actitud positivo ante la adversidad.