Sebastián Ra

Soy de ver películas navidad. Me gusta el tinte optimista, practicamente a mi entorno climático opuesto y mi caracter contrapuesto a la luminosidad que brindan este tipo de películas. Suelen no conmoverme y en su mayoría me quedo dormido, pero las banco. Ahora esta película me sorprendió altamente. El meter a refugiados yugoeslavos en la misma, La historia del personaje de Emily Clarke que justamente no es el mejor, es decir, todo mal. Me hizo emocionar en muchos trayectos, y no me emociono generalmente. Tanto Clark como Golding tienen expresiones gestuales muy profundas, quizás el trabajo de edición fue genial, pero él y ella conmueven profundamente, asi como todas las personas que acompañan. ¡Para verla muchas veces!