María Paula Bianchi

Realmente una vergüenza, no sé cómo mantienen está película con contenido y comentarios sexistas y de odio. Ej: el perro le dice a la gata que está maquillada como unas mujeres que trabajan en la calle a las que les dicen "frutas". En otra ocasión una niña, en su rol de caprichosa y rebelde, le pide al protagonista su ropa interior a cambio de información sobre su mascota. En otra escena la mujer se saca toda su ropa quedando con el torso al desnudo para darle a su compañero (que fingía ser ciego) el arco de su corpiño para escapar de la cárcel, mientras los policías miran baboseandose a través de las camaras de seguridad. Al principio una pelea entre el protagonista y un personaje que se hace pasar por policía se desarrolla en un asilo de ancianos y destrozan el lugar usando tubos de oxigeno y bastones como armas. El perro le dice repetidamente a la gata que está gorda, de forma despectiva.