La danza final de Kali (2010) fue censurada y descatalogada por la editorial que la distribuía impidiendo que se convirtiera en un superventas, hace relevancia a causa del pasado pero desborda actualidad y futuro, haciendo confirmar: la instauración de una dictadura planetaria, la implantación del terror a base de pandemias de laboratorio, la imposición de diferentes religiones políticas, la manipulación informativa o la disociación psicológica de las masas a través de la industria cultural (les suena). En 2022 se está en condiciones de aseverar que el Novus Ordo Seclorum anunciado en esta obra.