Me tomó la friolera de 13 años disfrutar de semejante delicia.
Y todo por pendejo al menospreciarla pensando que era una peli del montón.
Lo cierto, es que es una verdadera joya para los amantes del género del terror-comedia.
Porque sÃ, uno puede reÃrse mucho viendo terror, y me explico:
Sam Raimi, quien antes de esta pelÃcula dirigió la trilogÃa original de Spider-Man con Tobey McGuire, empezó su carrera haciendo terror con la trilogÃa constituida por Evil Dead, Evil Dead 2 y Army of Darkness.
Esa saga marcó una buena época de cine de terror cutre, con sangre y tripas por doquier, acompañado de una gran cantidad de risas.
Con su vuelta al género, Raimi logró una hora y 39 minutos muy disfrutables. Tomó muchos elementos de su saga de terror original, y nos pone a llorar a carcajadas con escenas como la del golpe del yunque en la cabeza de la bruja.
Los efectos son buenos para la época, abundan cositas asquerosas tÃpicas del género como gusanos, vomitadas y ojos en un pastel... tú ya sabes.
Las actuaciones son decentes y se ajustan a un guion simple, pero que funciona. Por ratos se vuelve desesperante la persecución de la lamia a la pobre protagonista.
El final es entretenido, pero predecible en gran parte por culpa del póster, el cual contiene un spoiler tan grande que ni para qué lo menciono.
En resumen, le doy CUATRO ESTRELLAS. Definitivamente, la volverÃa a ver, recomendada para quienes quieren pegarse unos buenos "scare jump" al mismo tiempo que sueltan unas buenas carcajadas.