Comienzo como no se debe, con una comparación. Me ha impresionado mucho menos que los miserables. Dicho lo cual, es una novela muy buena y muy completa. A los amantes del arte la parte en que se describe el interior de la catedral y su proceso de construcción, les va a encantar. A los de la historia alucinatán con el relato de las diferentes capas con las que se viste París. Una tragedia y un desengaño, amoroso, vital, místico y filosófico. Una maravilla