La historia es historia. No sé puede alterar. El problema radica en cómo se cuenta. Y en esta pelÃcula es muy rebuscada. Lo que la hace tediosa y aburrida. La temática es más que interesante. Pero en su relato, yendo y viniendo a pasado (cuando se coordina el armado de la bomba) y presente de R. Opennheimer (cuando se cuestióna a éste en su forma de accionar) uno se desenfoca.
Y la música, que por hacerla más interesante en algunos momentos es más que contraprudente,no dejando escuchar los diálogos. Los sonidistas deberÃan darse cuenta.