Un libro increible, con mucha fuerza e inspirador al máximo! Daniel Delevin consigue con este libro-diario de viajes el recordarnos que nunca nunca nos cansemos de soñar (como dice Manuel Carrasco en su cancion Nunca Dejes de Soñar).
Es increible lo pronto que olvidamos al niño interior para perdernos en la jungla de lo cotidiano. Como si soñar solo estuviera permitido a una élite. Tal y como nos recuerda el autor, soñar es un derecho universal y debe ser igual vivas donde vivas y seas quien seas.
Uno de los mejores libros de superación y desarrollo personal que he leido nunca. Gracias de verdad.