El libro presenta de manera clara asuntos complejos relacionados con el cambio climático, lo cual ayuda a comprender el reto ecológico que tiene la humanidad por delante.
Desafortunadamente, la narrativa plantea de manera superficial los efectos positivos de los cambios de comportamiento de consumidores.
El libro presenta la opinión de una persona capitalista con argumentos flintrópicos preocupado por el cambio climático, pues es lo que en su cúspide capitalista lo afecta directamente. No habla de los efectos de la contaminación, especialmente aquella producida por el desarrollo de equipos electrónicos ni los impactos que estos tienen.
Más bien, el libro parece una pauta comercial, que motiva a seguir consumiendo descaradamente. Es una pauta publicitaria para sus futuros proyectos libres de carbono, de los cuales está participando.