Maureen Monsalve

Sumado a los comentarios anteriores, tenemos un Jason Momoa haciendo gala de su naturalidad para la comedia, un hermano que en los 5 minutos que le toca hacer de malo, es un malo muy malo que convence más que el villano en toda la película, una casi conspiración que no se dió (por la pezcadilla azul) y que después no se supo en que paró... una Amber Heart que corría por el set cuando le robaron al hijo sin saber que hacer a nivel actoral (como las gallinas sin cabeza) y que le cortaron tantas escenas que se notaba que ni siquiera tenían la misma orientación en las miradas cuando se suponía que los diálogos eran en conjunto.. y ni que hablar que el personaje de Dolf Lungren que tiene escenas y diálogos en lugares donde está la hija (Mera) y no le dirige la palabra.... Una China (que la ponen de secuaz del Villano]) que es una caricatura de mala, de esas que alzan la ceja, ponen el ceño fruncido, como que tienen estreñimiento, y no trasmiten ni una pizca de maldad, sino de una pobre actuación, es una mala muy mal interpretada... un Jason Momoa que le faltaba una nana y que llevara al niño a un endocrino pues en 6 meses que transcurrían entre la primera escena y cuando empieza el desmadre nunca creció... una reina Kidman que parece que los del CGI que le quitaron el bigote a Superman en Batman Vs Superman, le programaron las tomas de la boca cuando hablaba ... y monstruos sacados de Piratas del Caribe, una mezcla que no se entiende, y unas graficas, sobre todo al inicio, que recuerdan las peliculas de los 80´s de monstruos. Tuvo sus momentos, pero de verdad da pena ajena...