Dulce María Gómez Álamo

Uno de sus mejores libros de los últimos años. Me he leído todas sus publicaciones y con algunas no he llegado a conectar tanto como con sus primeras historias, sin embargo, que el narrador de esta novela sea el chico y no la chica, hace que el argumento y la perspectiva sean muy interesantes. La historia es divertida, es reflexiva, es honesta, adictiva, te permite desconectar y reconectar contigo misma. La única pega que le pongo, es que a veces se nota que quién narra no es un hombre, por los detalles con los que cuenta cierto tipo de cosas. Muy recomendable