Mala, malísima, pésima. Lo único bueno es la actriz. El guión y el libreto parece mandado a hacer por la misma realeza que tanto la persiguió, para hacerla ver como si estuviera loca y llena de niñerías. La película no muestra la realidad de lo que fue esta bellísima, brillante y gran mujer. No es posible que en una escena salga hablando sola con una chaqueta del papá o con una paloma, cuando ella tuvo tantas conversaciones con gente seria como la Madre Santa Teresa de Calcuta. De sus obras y visitas a la gente necesitada en África tampoco se vio un pito. Perdí dos horas de mi valioso tiempo viendo semejante cosa tan mal hecha.