Una de mis favoritas de Murakami. La trama es interesante y misteriosa, los personajes inolvidables, la hipertextualidad tanto interna como externa de los personajes que están todos en una sensación de despertar los hace muy queribles, gatos hablando con Nakata, algo de música con el trío de archiduques, despierta al lector ese ritmo propio de la escritura fluida e interesante del autor.