El personaje de Alex, en la segunda temporada, roza lo inverosÃmil, pero el ritmo y la tensión son buenos. La forma de conectar la serie con los eventos de la realidad es inteligente y amena. Los diálogos son excelentes y están bien escritos; lo que es más difÃcil de creer es que todos los personajes sean tan elocuentes en situaciones crÃticas, pero eso pasa cuando se escriben las conversaciones en la soledad del estudio. Si te gusta la tensión, las peleas, la traición y la puñalada trapera, esta serie es la tuya.