Buenos días.
Soy un profesor de educación secundaria aficionado a la música, pero sin ningún título académico de carácter musical que pueda refrendar mis opiniones. Aún así, mi gusto y afición por la música me impulsa a emitir mi juicio (razonado) sobre el programa “La Voz kids” que he visto, ayer, por primera vez.
El programa mencionado ha sido, para mi, decepcionante por dos motivos:
1) Con todos mis respetos, que gente como David Bisbal asuma el rol de juzgar el desempeño musical de otras personas, sin ningún tipo de titulación musical, no lo considero acertado. Lo
único que acredita a David Bisbal es el éxito que él ha alcanzado como artista y a mí no me parece suficiente. ¿Por qué no aparece en el tribunal de “La Voz Kids” profesores de canto? Supongo que
no tendría el mismo “tirón televisivo”. Así las cosas, la selección del jurado parece seguir criterios “televisivos” en lugar del más justo criterio de “acreditación musical”...
2) ¿Qué es lo que se valora en este programa? ¿La aptitud y el virtuosismo a la hora de cantar o la puesta en escena del cantante? Para cualquiera que se haya adentrado en el mundo del canto resulta evidente que, por ejemplo, cantar a voces presenta un nivel de dificultad muy superior a cantar en solitario. ¿Por qué no se ven dúos o tríos de participantes cantando a voces...? Me temo, otra vez, que en este programa (o en esta clase de programas) vuelve a tener mas preponderancia el postureo y la pretensión de convertir en divo/a al cantante que el virtuosismo en el canto.
Lamentable.
De lo visto ayer en el programa, a modo de conclusión, solo puedo decir, tristemente, que “La Voz Kids” me parece un programa que ensalza la mediocridad. Es muy triste ver los fuegos de artificio montados en torno a logros musicales de poco valor y de un más que dudoso mérito. Soy consciente de que algunos de los niños o niñas que han participado en este programa (y sus padres también) puedan sentirse dolidos por mi opinión. En ningún caso pretendo ofenderlos y vaya por delante mi ánimo a que sigan disfrutando de la música y el canto. Mi crítica va dirigida al propio programa, por su carácter de “espectáculo vacío” que no promueve el auténtico valor de la música como arte y como medio de expresión.
Sergio Gallardo Pena.