Como todas las series/películas ambientadas en la Europa de la Segunda Guerra, el ambiente pálido y lúgubre está a la orden del día. Se ve levemente inspirada en el Pianista, tanto en su trama como en su historia, además de que sus protagonistas son de la misma etnia. Demasiado predecible y con un gusto a algo que ya se ha probado antes, no trata de innovar ni de lanzarse con algo intrépido. Algo para pasarse la tarde si no hay nada más que ver.