No aporta nada nuevo a lo que ya hemos visto durante un año. La narración de Darin y el guión demasiado solemne, cero emotivo, y poco cerca del espectador.
Y al final, parece que se hubieran arrepentido de no mostrar demasiado de la gente y los festejos y te dan como 10 min de imágenes sueltas de los festejos, repetidas, pero otra vez, sin emotividad.