Gastón Nicolás Castello

Se reitera en círculos de pena y sufrimiento que no desembocan en ninguna herramienta narrativa, que otorgue profundidad argumental. Abusan de la contribución artística del canto por demás. Se torna por momentos muy extensa y aburrida. Un pequeño giro de esperanza surge con la escena de la destrucción del tribunal, pero termina siendo una oportunidad desperdiciada absolutamente.

Original y bien actuada. La inverosimilitud de su trama, se asimila sin problemas, gracias a la correcta concatenación de los eventos en el relato que elije desarrollar el director.