Es maravilloso y sentimental, creo que toca la parte profunda de uno mismo, en cierto modo sintiéndose similar a algunos sentimientos que acompañaban a esta talentosa niña, que relataba su día a día esperando lo mejor al final. Sinceramente casi me hace llorar el hecho de lo cruel que puede llegar a ser el mundo y a pesar de ella verlo todo, ser una adolescente, contaba con la madurez suficiente para pensar en cada acto y contarlo a su manera, de la que no me opongo. Gran diario.