No soy una persona tan religiosa que se diga, sin embargo leí EL POBRE DE ASIS" a mis 18 años y es uno de los libros que más me impactó y por qué no decirlo, influyó en mi actitud y visión hacia las otras personas, El pobre de Asis, no es que enfoque a la religión como tal, sino que nos enseña a amar al prójimo de una manera tan pura, tan desprendida, que como dice el mismo Francisco, cuando ayudemos a una persona, debemos hacerlo con tanto amor, que incluso debemos olvidarnos de Dios. El Pobre de Asis, nos enseña que antes que con rezos y ceremonias, es con nuestro amor sincero hacia el prójimo, que estamos honrando los mandamientos de Dios.