Acabo de leer el libro. Me pareció aborrecible, monótono, el sexo explícito y casi guarango (aclaro que no soy un pacato y me regocijo con el sexo bien narrado) como única justificación de una historia que no aporta nada a los que conocen algo de la historia virreinal. Escrito en un estilo sensiblero típico de las novelas de amor de fines de siglo XIX y principios del XX, pero mal escrita. En síntesis, un verdadero bodrio. Una buena experiencia para no volver a comprar libros baratos. Florencia Bonelli es Dostoievsky al lado de la Guarinoni.