Básico, nada nuevo, trata de los “problemas” de ser adolescente y la inserción a la vida adulta, pero la protagonista es completamente mediocre (se va dando cuenta de eso a lo largo de la historia).
El libro puede ser bueno si el lector se identifica con una persona que pasó la mitad de su vida de fiesta, buscando refugio en el alcohol y en el mundo de las citas por internet.
Si no es su caso, recomiendo saltarlo.