Nunca pensé que un libro me lo pudiera terminar tan fugazmente.
Realmente la capacidad de ensimismar, los volubles y característicos acontecimientos hacen a esta obra tan hermosa.
Me encanto la película, pero siempre me dejo insatisfecha la expresión amorosa entre Lizzy y Darcy, sentía que les faltó sacar provecho al amor que se ilustra en el libro, en conjunto con sus conversaciones. El desenlace de la película, es emocionante, pero también me dejaba perpleja, y en cuanto pude acabar el libro me di cuenta de lo mucho que difieren ambas obras (No obstante, no podemos negar la escenografía, diálogos y actuaciones que hacen que la película tenga mucho mérito).
De igual manera, amé el libro, le tengo un cariño indiscutible, la forma en que nos hace llegar la autora, la forma de detallar cada acontecimiento, de expresar cada sentimiento, es un dicho que no todos poseemos. Y sin duda, amé el desenlace de la historia, la amé sin discusión, me encanto, me sació de lo que me había ilusionado la película.