Persik Flor

Una serie que nunca decide lo que quiere decir. En cada episodio hay mucho tiempo en pantalla que implica un romance entre Marinette y Adrien. Pero su amor siempre es imposible. De la misma manera todos los personajes tienen alguna historia propia, algún conflicto propio que se repite en cada episodio. Pero la serie es engañosa. Nos hace pensar que los personajes avanzarán y la historia avanzará. Pero no es así. A veces la historia avanza, pero solo para luego retroceder para ser similar a la temporada 1. Los protagonistas nos dicen que aprenden enseñanzas de vida y avanzan hacia el futuro. Pero ninguna de las enseñanzas o mensajes de la serie es creíble porque los personajes retroceden. Es como si todos los personajes, los héroes y los villanos tuvieran pérdidas de memoria en cada temporada. En conclusión los personajes no aprenden y no nos enseñan nada, y la serie tampoco. Los personajes se contradicen a si mismos. La serie se contradice a sí misma. Y por eso esta serie no nos dice nada.