Eça de Queirós hace un retrato literario exquisito de la hipocresía moral de la sociedad lisboeta y portuguesa del último cuarto del s. XIX. Describe de manera soberbia, todas las fases emocionales del adulterio: flirteo, miradas intensas, caricias, desfogue sexual, celos de amantes y, por supuesto, la ruptura final. Si bien es cierto que, tanto Luisa como su primo Basilio, son los personajes principales, hay que destacar el protagonismo absoluto de la sirvienta Juliana y su total falta de escrúpulos a la hora de aprovechar la situación. El final de la novela es apoteósico. El barrio del Chiado, la calle Magdalena, el hotel Central la Ópera ... ya son lugares que forman parte del ideario literario universal. NOVELA DE 10. RECOMENDADÍSIMO.