Es una obra maestra de la Literatura Universal, en la que el egregio Lucrecio pone de manifiesto la existencia de un mundo sin "dioses", pintando la realidad nefasta y negativa que éstos representan para la humanidad terrestre que basa su vida presente y futura en idealizaciones torpes y pusilánimes. La idea de un "omnipotente dios creador" se opone a la imperfección de nuestro mundo, y a la violencia y maldad que caracteriza la naturaleza del ser humano en general, y más bien es una evidencia de que la vida no es una circunstancia exclusiva del planeta Tierra, sino que más bien es originaria de otros mundos, incluso no captables por la grosera materia humana, ya que la inmensidad del Universo abarca otras materias de sutilezas más nobles en su quintaesencia.