Es una joya que colecciono con aprecio. La fuerza que despega desde Insomnia y la evolución en cada uno de sus temas, es inigualable; llena de matices encantadores, que van desde buenos y melódicos riffs hasta transformarse en sonidos oscuros seguidos de la furiosa e imponente guitarra de Marty Friedman. Lo considero un poco infravalorado pero en gustos y colores...