Recomiendo ampliamente esta obra. El editor Magnin lidera un grupo diverso de cristianos y nos regalan una veintena de ensayos que erigen hábilmente sobre un trípode: cultura, problemas de la Iglesia actual y teología. El ejercicio resulta exitoso y me gustó por tres razones:
1- Los vehículos culturales de cada ensayo casi parecen concebidos para articular con la fe.
2- La Iglesia se reverbera en la pluralidad de estos autores.
3- Un ensayo me retó de manera muy especial: "La fe de nuestras abuelas", de Daniel Montañez. Me hizo pensar en la abuelita y matriarca de mi familia. En como su fe, y con poca formación, ha dejado una impronta preciosa.