Como historia es lo que siempre debió ser, lo que tenia lógica, narrada de forma hemocionante y bellÃsimamente lograda. La estética que puede ser difÃcil de asociar al comienzo, toma sentido con la forma de divinidad en que se muestra el santuario y por consiguiente en sucesión todo lo demás. Me calló la lágrima.