La obra Frankenstein o el Moderno Prometeo, escrita por Mary Shelley escritora dramaturga, ensayista y biógrafa británica quien nace y fallece en Londres (1797- 1851), en 1893. Es una novela gótica y revolucionaria que, bajo mi punto de vista más allá del terror que pueda aportar se encuentra una crítica profunda y una reflexión moral. Es una novela que hace pensar al lector sobre el poder de la creación del hombre y las consecuencias de sus actos. El monstruo creado por el científico Víctor Frankenstein, que desacertadamente se le atribuye el apellido de su creador, tiene un gran conflicto existencial. Llega a conocer ambas facetas de la especie humana, por un lado la bondad y el amor de los hombres, pero también la crueldad y la malicia. El monstruo quiere vengarse de su creador por haberlo hecho así, cruel y desmedido además de su sentimiento de abandono. La armonía de la novela es fascinante, te atrapa, te deslumbra, te envuelve, una vez que empiezas es muy complicado parar.
La estructura del libro se basa en cartas que se escriben entre personajes alegando lo que les pasaba y las propias vivencias del monstruo y de Víctor. Como dije antes, al monstruo no se le atribuye ningún nombre definitivo sino que se le nombra con adjetivos o con la propia palabra “monstruo” esto indica que la criatura con el paso de los años ha adoptado malamente el apodo “Frankenstein”. Gracias a este libro he podido conocer la verdadera historia, que la industria cinematográfica ha cambiado a su antojo, es lo bueno de leer los grandes clásicos. Un libro bastante recomendado si te gustan las novelas lóbregas.