Andrea Cardona

Mi hermana me convenció de ver la película, y no tenía altas expectativas. Ni siquiera conocía la historia real del accidente. Pero al verla, te rompe. Desde el primer momento sientes la frustración, el dolor, la impotencia y la desesperación. Conectas de una forma tan intima con la situación que sientes cada perdida y cada decisión. Es increíble el nivel de compromiso de Bayona con el realismo de la historia. El reparto de actores hace que te sientas aún más identificado con la tragedia porque te hacen sentir que la viviste y que la vives de nuevo al ver la película. Varias críticas y reseñas se han centrado en comparar la cinta con Viven de 1993. Pero sinceramente, esta no te conecta con la historia. Sientes que estás viendo una película estadounidense genérica de heroísmo y acción. "No hay amor más grande que el que da la vida por sus amigos"