Facundo Quadri

Antes de entrar en detalle, no la consideraría una película de automovilismo. Es otra historia más, que da la casualidad que tiene autos de carrera en varias escenas. SPOILER ALERT Me cuesta creer que una película acerca de la franquicia Gran Turismo tenga tan poca información automovilística. Los autos que se muestran son hermosos, reales logros de la ingeniería, pero no hay ni una mención acerca de sus prestaciones. Con los circuitos lo mismo, no hay una especificación de los mismos. No hay detalles acerca del mundo automovilístico. Ni uno. Mucho menos de las competencias y categorías en las que participan. Después hay detalles muy grotescos. Ponen que un piloto argentino se llama Henry. Cuando el protagonista corre la carrera que le da el ingreso a la academia, arranca el evento doblando mientras el auto va en línea recta. Deciden quién gana la carrera a través de un vídeo (hace años que se usan sensores hasta para los track day más baratos). La historia es predecible, cliché. Un ejemplo zonzo, el protagonista invita a una chica a la firma del contrato en vez de invitar a su mejor amigo. Dale. En fin, esperaba una película relacionada al automovilismo y me terminé encontrando con otro drama de cine de televisión.