Es agradable visualmente, parece sencilla en principio, pero hay capa tras capa de profundidad emocional. Si te abres a la experiencia, puedes darte cuenta hasta que grado nos dominan los tabúes acerca de la sexualidad en especial la femenina y la necesidad de certezas, Creo que no estamos preparados para que lo patologico como la dependencia tenga algo positivo o que pueda llegar salvarte y eso esta bien. Deja en claro el edipo de tamaño catedral que no resolvieron adecuadamente las protagonistas de niñas y sus consecuencias adultas.