Todos los personajes lo bordan, principalmente la anciana condesa, el mayordomo, Isobel. La música es maravillosa y el entorno también.
La forma de comportarse el servicio y saber cuál es su lugar, es muy curioso.
La trama nos enseña las inquietudes de las diferentes personas que conviven en la mansión.
Me encantó y la estoy viendo por segunda vez.
Recomendable.