Y por fin, después de tanto autobombo, llegó este bodrio.
Previsible de principio a fin.
¿Y la dirección de actores?
Una serie (ruego que haya continuidad para darle algo de crédito), que decepciona.
Interpretaciones lejanas a lo que uno espera... Muy lejanas.
Se salvan Santiago Korovsky y Lanzani.
Bien, como siempre, Awada, Celentano y Fanego. Se nota y mucho su probada experiencia escénica.
¿Los demás? Carentes de emociones, matices y sensaciones para cada personaje asignado.