Todos conocemos el poder que tienen las redes sociales en nuestra época, entendemos que es un medio a través del cual la forma en la que nos comunicamos y compartimos opiniones tiene mucho más alcance que el que tenÃa en el siglo pasado. Sin embargo, esto ha permitido que existan varias disonancias entre lo que en realidad sucede, a lo que nosotros podemos emitir o recibir.
Las redes sociales fueron creadas con el propósito de unir, de consagrar esta "época de información", pero claramente sucede que esto ha tomado un rumbo distinto al imaginado en un principio.
Esta docupelÃcula nos permite mirar la manera de como funcionan los algoritmos de las redes sociales desde otro punto de vista; de cómo nuestra naturaleza es tan fácil de manejar a través de un sonido de notificación, de la manera en que nosotros respondemos ante este instrumento de manera incluso mecánica, de como nosotros nos convertimos en la rata de laboratorio de las grandes compañÃas.
Las redes sociales no son únicamente una herramienta para las personas, las cuales utilizamos únicamente en momento de necesidad, si no que nos hemos enlazado tanto a ellas que a través de las mismas, se puede conocer tanto de nosotros, incluso más que haciéndonos una introspección. En donde, gracias a esto, se lucran con cada pequeño vistazo que le echamos a la pantalla. En donde cada vez existe más tensión entre grupos partidarios, en donde cada vez aumentamos nuestro valor como persona en base a un determinado número de "likes".
Las redes sociales, si bien, no llegaron a plantar el mal, la desigualdad, el odio; sin embargo, el rol que cada uno de nosotros le ha dado, ha permitido que transforme nuestra realidad de una manera abismal. Y es cuestión de tiempo que nos consuma por completo.