Sin duda alguna Dios está obrando milagrosamente a través de todas las personas que hicieron posible ésta pelÃcula! Una pelÃcula muy bien hecha, con un delicado pero contundente manejo del tema, evidencia un absoluto respeto por los niños que participaron y un mensaje final directo y concreto.
Hombres y mujeres de oración, debemos seguir pidiendo que el EspÃritu Santo se haga presente en los corazones de aquellos que tienen posición de poder, para que El llene sus corazones y encienda en ellos el fuego de Su amor.
Para Dios sea toda la Gloria!