Una obra de arte, honestamente jamás he experimentado una vivencia como esta, quedara permanentemente grabada en mi memoria. Los últimos segundos del metraje son sin duda una joya del cine mudo y un reflejo de como hacer una buena y trascendental obra. La música también es excelente, refleja la felicidad del cerdo. Simplemente una obra maestra del séptimo arte. 10/10.