Lo peor. No me fui del cine porque las entradas hoy en dÃa cuestan mucho y doy gracias de no haber ido con mis hijos. La pelÃcula abusa de un lenguaje vulgar y ofensivo, utilizando una cantidad excesiva de palabras malsonantes que resulta difÃcil de tolerar. Esta elección no aporta valor a la trama y termina distrayendo del desarrollo de la historia. Si bien entiendo que algunas expresiones pueden ser necesarias en ciertos contextos, en este caso el uso de palabras groseras parece gratuito y desmedido, afectando negativamente la experiencia de verla.