Si esperas una pelÃcula completamente fiel a los cuatro evangelios, aquà no la encontrarás. Sin embargo, esto no significa que sea una mala obra cinematográfica. La visión que presenta National Geographic en esta pelÃcula es una reconstrucción de los últimos dÃas de Jesús de Nazaret, enfocada en los hechos que condujeron a su crucifixión. El enfoque adoptado es secular e histórico, lo que permite explorar al Jesús histórico a través del prisma de las ciencias históricas, distinguiéndolo del Cristo de la fe, que es el objeto de la devoción y las creencias cristianas.
Esta pelÃcula está diseñada para ser accesible tanto para creyentes como para no creyentes. Al evitar una perspectiva doctrinal, no se abordan elementos sobrenaturales como los milagros o la resurrección. Ya que estos hacen parte de la fe del creyente pero no de la historia como ciencia, de hecho Jesús no hace como tal milagros en ningún momento del metraje. Esta decisión, lejos de ser una carencia, es una fortaleza que refleja el rigor metodológico de las ciencias históricas. Los milagros, aunque esenciales para la religión cristiana, no son verificables históricamente, por su naturaleza milagrosa y su omisión refuerza el propósito de explorar al Jesús humano dentro de su realidad histórica. En este sentido, opta por un enfoque ecuménico que evita favorecer una visión confesional especÃfica, permitiendo que uno como espectador reflexione sobre la figura histórica de Jesús sin que se vea mediada exclusivamente por interpretaciones teológicas, creo que en esto cumple, de hecho es raro que existan cintas con solo con un enfoque histórico y no teológico. Pero como entretenimiento, creo que un documental serio harÃa el mismo trabajo y seria mas claro en su intención. De hecho, al centrarse únicamente en el Jesús histórico y evitar dramatizaciones innecesarias, la pelÃcula se acerca más a lo que podrÃa considerarse un documental dramatizado. Esto plantea la pregunta de si un documental serio, construido con base en la investigación histórica y con un enfoque más explÃcito en el análisis crÃtico, podrÃa haber cumplido con mayor claridad y eficacia el mismo propósito. Un documental permitirÃa profundizar en los debates historiográficos, las fuentes y las interpretaciones académicas, mientras que el formato cinematográfico podrÃa resultar limitado para abordar estos aspectos de manera. Al final creo que la pelÃcula no logra ser justa en que tipo de retrato histórico debe darse a Jesús, ya que de por si, de las tantas reconstrucciones que se han hecho en el ámbito académico estas son todavÃa objeto del debate.