Vale la pena para darte cuenta que en la actualidad en paÃses que se venden como primer mundo, siguen haciendo todo mal.
El trabajo de las chicas a nivel deportivo, y en muchos otros aspectos, es increÃble y de élite.
Pero el trasfondo de justificar cualquier cosa por un sueño, es vomitivo.
Para empezar la dedicación que han de tener no se ve remunerada en proporción al tiempo y riesgo que asumen. Creo que ponen más riesgo en su vida y más horas en ello, que los propios jugadores de la NFL con sueldos millonarios.
La selección del equipo de animadoras se justifica en su búsqueda de excelencia para descartar a las chicas por su aspecto fÃsico. Y no se trata de una preselección, sino una vez sometidas a entrenos pueden echarlas porque no les cuadra su cara, o aún peor, al probarse el uniforme, critican el tamaño de sus pechos, culo, o si tienen poca curva o mucha y es un motivo como cualquier otro para mandarlas a casa sin más.
Las someten a cambios de look que no deciden ellas. Haciéndoles "mejoras" para poder seguir ahÃ. A pesar de estar a niveles artÃsticos elevados y trabajando en ello.
Muchas veces las puntúan mirando sus fotos el peluquero del pueblo y uno que patrocina la NFL que tienen idea de baile lo mismo que yo...
También puedes viajar a los 90, cuando te requerÃan ser un maniquà para ser válida para cualquier cosa, sin ningún tipo de escrupulo ni disimule. Una chica, en un peso normal, probablemente bajo, la descartan por tener "flácida la barriga". La chica se presenta al año siguiente con mucho menos peso. Y luego, la critican por que no se nutre bien y dicen estar preocupadas por su salud. La animadora en cuestión al final reconoce tener trastornos alimenticios y depresión por haber luchado contra su propio aspecto por el rechazo que habÃa generado a pesar de ser excelente en su práctica, y guapa (por que si no eres guapa no tienes opción a respirar cerca de ellos).
En fin, le he dado dos estrellas por respeto a ellas.