Un golpe bien refrescante en el cine mexicano. Aquí no hay peleas de clases sociales aburrídisimas, no es un romcom mediocre.
No es una obra maestra. Pero el guión, las actuaciones y la ambientación son una caricia al alma, plasmada de una realidad quizás fantasiosa, pero que refleja el estatus quo de lo que se puede llegar a vivir en una cotidianeidad en México. Muy linda, conmovedora de verdad.