Extraordinaria novela. Será, me parece, una de las grandes novelas de nuestro México en nuestros días. Un sentido testimonio de la ciudad de México (la colonia del Valle y su Carnaval en los años 60, los cambios de un adolescente entrañable, sus amores, sus buenas ( /y otras no tan buenas) maneras en la escuela, la aparición del amor y de Magdalena (la Nadja maravillosa que como Penélope hila las distintas historias), la vida y el testimonio de un joven estudiante de ingeniería en la UNAM cuando Barros Sierra y los 60, la barbarie de "la perrada", un sentido testimonio del movimiento estudiantil del 68 narrando la atrocidad de Tlatelolco, una elección de vida y de vocación en la muy sentida y concreta Facultad de Filosofía y sus maestros de literatura, y las dinámicas sociales narradas de manera personal y sin igual, el caleidoscopio de las calles y los personajes, amigos y familiares que resaltan en un singular carnaval. En fin, una lección de escritura sin igual. Ejemplar. Hernán Lara Zavala se revela, como en sus otros libros ( pienso sobre todo en Península, península), de nuevo, como un gran escritor, con genio, sensibilidad, pertinencia y oficio.