Reflexión sobre nosotros los individuos como objetos manipulados, con el propósito de mantener nuestra atención en las redes sociales, aprovechándose de nuestros sesgos cognitivos. Realmente no importa si una información es cierta o falsa. Lo que importa es que sea atractiva. Asà la red puede vender nuestros hábitos a las firmas de mercadeo.