Excelente. Gracioso. Ácido. Se pasa volando cada capítulo, como si durara 10 minutos...esto es debido a su altísimo ritmo: combinando constantes gags (el chiste nunca se hace esperar) con una línea argumental definida, sostenida por personajes previsibles y exagerados... en esa medida justa en que lo requiere una comedia pesimista y crítica. Increíbles actuaciones, muy buen guión, con un giro sorpresivo interesante al final.
Un programa diferente, que marca cómo serán los shows en un futuro cercano.